18 feb 2009

Mi Facebook es mío


Se veía venir porque con eso de las etiquetas en las fotos se había armado un relativo descalabro que ya no nos estaba haciendo mucha gracia a algunos de los usuarios. Eso de que alguien te etiquetara y tu foto anduviera rebotando por buena parte de la red social me venía a cuento de la frase "ponerle una estampilla en el..." sí, ahí. Bueno, así, no tan de a poco, llegaron los de Facebook a la resolución de que los contenidos subidos por los miembros no sólo serían propiedad de la red mientras que uno esté adherido al servicio, sino que serían de Facebook a perpetuidad. Las quejas y malestares -aclaración que oscurece de su fundador Mark Zuckerberg mediante-fueron lo suficientemente eficaces -sumados a la sensibilidad del tema de la propiedad de derechos en la red- que hoy anunciaron que dan marcha atrás con la medida y no tendrán propiedad sobre los contenidos de cuentas que sean eliminadas. Así es como debe ser. Todos los usuarios yusuarias suponemos que Facebook no utilizaría nuestro material en algo que no los favorecería tampoco a ellos. Pero qué pasa si ese material se suministrara a terceros, sobre todo a través de la famosa "filtración de datos" , falla de la que no escapan las grandes empresas del rubro? Como autocrítica a los usuarios, para saber bien lo que nos propone cada empresa, debemos dejar de considerar a la letra chica de los contratos como tal y comenzar a tomarla en serio. Nuestros datos, nuestra privacidad y el futuro de la internet es lo que está en medio.