4 feb 2010

Un perro en Ecatepec (el caso Atorreta)


Una vez más viene a cuento lo del chiste aquel de: "nadie sabe en internet que eres un perro", que le dice a un can a otro mientras conversa vía web. Un tremendo engaño, tratar de de simular un crimen que no fue, deudos y demás es la historia que alguien pergeñó y tuvo en vilo a parte de los usuarios mexicanos de la microred Twitter (allí donde se escribe en un máximo de 140 caraceres). En el sitio FaroViejo pueden leerse los twitts en cuestión, sobre la supuesta sucesión de hechos en torno al crimen de Andrea Torreta y su novio Jesús, en un bar de México, anoche mismo.

Pero todo no era lo que parecía. La cuenta de la usuaria @atorreta (Andrea) fue eliminada y el hecho aparentemente nunca existió. Los textos subidos por su cuñado serían falsos y creados sólo para causar revuelo o dar notoriedad a los periodistas que difundieron la noticia. Los servicios de ambulancias de Ecatepec y el hospital de las américas, donde supuestamente habían llevado a la pareja agonizante, desmintieron el hecho. En apenas unas horas -y racias a la celeridad de muchas y muchos twitters de México, la mentira cayó y la verdad sobre sobre los hechos salió a la luz. Es impresionante la cantidad de twitts que al respecto están apareciendo ahora mismo en el search de twitter.

Cabe recordar que Twitter es considerada por los especialistas como la vía mas rápida de información al momento. Grandes primicias (en una época donde las primicias prácticamente no existen), como la del avión en el Río Hudson, fueron transmitidas a través de textos y fotos en la microred y sirvieron de fuente a los principales informativos a nivel mundial. Hay muchso más casos, como las manifestaciones de ciudadanos organizadas vía Twitter, o el reciente caso de las manifestaciones y convocatorias vía esta red en Irán.

En lso hechos del caso Atorreta, quedan las usuarias y usuarios de Twitter conmovidos por una noticia que no fue real. Como corolario, recordarle a quienes idearon esto que el chiste del perro tiene una segunda parte y es que no es tan fácil mantener una mentira en internet. Valga este caso para demostrarlo.